Daniel y Darío, dos hermanos de récord
En los últimos coletazos de la temporada de atletismo, repasamos la trayectoria deportiva de los hermanos Blanco y en especial de esta última temporada, que a buen seguro ninguno de los dos olvidará, y no solo por los resultados deportivos
Daniel Blanco: “Mi mayor ilusión sería competir en un absoluto con mi hermano”
Daniel y Darío, los hermano Blanco, han firmado la que, hasta ahora, ha sido la mejor temporada de su vida, con tres marcas personales y sendos récords absolutos de La Rioja en 400m vallas en el caso de Daniel, y dos marcas personales y mismo número de récords absolutos de La Rioja en Lanzamiento de Martillo en el caso de Darío.
A estas alturas, hay aficionados al atletismo riojano que todavía desconocen el parentesco entre ellos. Distintas especialidades atléticas y en consecuencia distintos entrenamientos y por supuesto, distintas características físicas, no hacen relacionarlos más allá del apellido. Así pues, vamos a conocer un poco más a estos jóvenes atletas y sus trayectorias deportivas hasta esta última temporada que siempre guardarán en la memoria.
Los hermanos Blanco nacen en San Sebastián, Daniel hace 26 años y Darío hace 22. Ambos vivieron en Tolosa hasta que el mayor cumplió 8 años y se trasladaron junto a sus padres a Logroño. Fue precisamente el hermano mayor quien primero se inició en el mundo del atletismo. Lo hizo un año después de llegar a Logroño, sin antes haber practicado otro deporte, de la mano de Raquel Moreno como actividad extraescolar del colegio Obispo Blanco Nájera. Uno de los entrenadores que pasaron por este colegio fue Héctor Barrasa, quien le animó a que se uniera a su grupo de entrenamiento en el Adarraga.
Darío comenzó a practicar atletismo un año después de que su hermano iniciara la actividad deportiva en el colegio, cuando tenía 6 años. Darío ha pasado por todas las categorías, desde pre-benjamín hasta Sub23 en la que se encuentra ahora por último año. La próxima temporada cambiará a categoría absoluta. En el caso del hermano pequeño sí que había practicado otros deportes como el fútbol y el judo. En atletismo comenzó también en el colegio Obispo Blanco Nájera, entrenado por Roberto Briones.
En sus inicios, ambos practicaron todas las disciplinas del atletismo. Daniel pasó de entrenar en el colegio a las escuelas de la Federación de Atletismo, antes de fichar con La Rioja Atletismo. Su poca constancia hizo que Héctor Barrasa no quisiera seguir entrenándole. Fue en esa temporada 2010-2011 cuando se funda el Hiber Rioja y Daniel pasa a formar parte del club en categoría cadete, entrenando en un primer momento con Rafa Ramos y después con Carlos Mir y más tarde con Francisco Mir. Por esa época ya fue encaminándose hacia las vallas por decisión propia, hasta centrarse en el 400m vallas que tan buenos resultados le ha dado en las últimas temporadas. Hasta llegar a categoría Sub20, Daniel nunca destacó, no ganando ni un campeonato autonómico ni consiguiendo ir a un campeonato de España, más allá de un Federaciones o un Intercomunidades.
En la temporada 2015-2016, comienza una mejora importante de Daniel en 400m vallas que le llevó ese mismo año al séptimo puesto de España Sub20 y un año después a batir el récord absoluto de La Rioja en el Campeonato de Federaciones, además de la mínima para el Campeonato de España absoluto.
Ya en categoría absoluta, Daniel considera la posibilidad de competir a mayor nivel en un equipo que dispute la Liga, algo que el Hiber Rioja no le podía ofrecer. A pesar del riesgo que suponía quedarse sin su entrenador al abandonar le Club, Daniel opta por fichar con el Atlético Salamanca, que estaba en División de Honor, y a entrenar solo. Durante un entrenamiento sufre un pequeño accidente que le obliga a estar retirado del entrenamiento y la competición durante 6 meses. Su primera competición tras recuperarse de la lesión es en mayo de 2019 en el meeting de Cartagena, donde comprueba su baja forma física. Esa misma noche Héctor Barrasa le propone regresar con él y su grupo de entrenamiento en el que estaba Ghaita El Jarraz también entrenando el 400m vallas. Daniel no lo dudó y a la semana siguiente ya estaba entrenando de nuevo con antiguo entrenador.
Tras cuatro años sin mejorar la marca que consiguió en 2017, al comienzo de esta temporada 2022 decidió que era el momento de intentarlo junto a su entrenador Héctor Barrasa, al grupo de entrenamiento con Ghaita El Jarraz, Eliani Casi y David Loza con los que coincide en las series, a la nutricionista Miriam Bravo y al fisioterapeuta Gonzalo Iglesias. La temporada al aire libre la comenzó en Cuba donde permaneció un mes junto a Héctor Barrasa y Eliani Casi. Allí, en el 400 lisos, firmó una marca de 48.17 y en la primera competición en 400 vallas 52.51, rebajando su marca y el de La Rioja. Consiguió además con las vallas meterse en la final del Campeonato de Cuba, clasificándose en quinto lugar. A su regreso a España, la racha de buenos resultados continuaron, venciendo en las dos primeras jornadas de la Liga Joma, con nueva marca personal y récord de La Rioja, y quedando segundo en la final. A mediados de junio volvió a batir su marca personal y la autonómica en 400m vallas, estableciéndola en 52.22.
Daniel cerró la temporada el pasado fin de semana en el Campeonato de España de Federaciones disputado en Granollers, donde fue primero de su serie y sexto del campeonato, defendiendo los colores de la selección riojana.
Por su parte Darío siguió en sus inicios atléticos la trayectoria de su hermano, pasando de los entrenamientos del colegio al Hiber Rioja con Carlos Mir como entrenador. Poco a poco los lanzamientos fueron los que se convirtiendo en su especialidad, entrenando con su padre durante dos años Disco, Martillo, Peso y Jabalina. A diferencia de su hermano mayor, Darío sí que se proclamó varias veces campeón autonómico mientras perteneció a categorías menores, no solo en los cuatro lanzamientos, sino también en vallas, en Altura o en Pértiga.
En categoría Sub16, Darío se centró en Jabalina entrenado por Francisco Mir. Consiguió mínima en esta disciplina para el Campeonato de España en Mataró y compitió con una lesión en el codo que no le permitió demostrar su potencial. Fue precisamente esa lesión de codo, que no terminaba de solucionarse, la que le llevó al Martillo, disciplina que le ha reportado sus mayores resultados.
Con 19 años, Darío pasa tres meses de erasmus en Irlanda donde solo puede entrenar fuerza en el gimnasio. A su regreso, a falta de menos de un mes para el Campeonato de España Sub20, consigue la mínima para el Nacional que se disputó en Granollers y donde logró meterse en la final de Martillo. A finales de esa temporada, ya en agosto, Francisco Mir le apuntó a un Control en el Adarraga, en el que Darío mejoró su marca en 4 metros con el Martillo de 6 kg para sorpresa de ambos. En su primer año en categoría Sub23, con el martillo de 7 kg, quedó quinto en el Campeonato de España, con marca personal.
En las dos últimas temporadas en categoría Sub23, la progresión no ha sido la esperada hasta el mes pasado, cuando ha conseguido mejorar su propia marca en 2 metros y batir el récord absoluto de La Rioja de Martillo dos veces en 15 días.
El final de temporada del hermano pequeño, que se debería haber completado con el Campeonato de Federaciones, la pasada semana, y el Campeonato de España Sub23 el próximo fin de semana, se vio truncado por un grave accidente sufrido mientras realizaba un examen en el Instituto Cosme García, que le mantuvo hospitalizado durante siete días, cuatro de los cuales en la Unidad de Cuidados Intensivos. Afortunadamente, el accidente no le ha dejado importantes secuelas y en las próximas semanas volverá a los entrenamientos. Ahora toca recuperarse, regresar lo antes posible a los entrenamientos de lanzamientos con Francisco Mir y a los de fuerza con Alfonso Melón y pensar en la temporada que viene.
El próximo año ambos coincidirán en categoría absoluta donde esperan y desean competir juntos en algún Campeonato de España y seguir con la buena racha deportiva de esta temporada.